El secreto: 2 fáciles y simples trucos para mejorar tu salud financiera.

Me llamo Alejandrino y ésta es mi historia.
Siendo joven -trabajador incansable- que buscaba salir adelante (como muchas otras personas de mi edad). Me enfrenté a la incertidumbre de saber qué me espera a futuro. Trabajaba como redactor a medio tiempo y cobraba lo necesario para mis necesidades básicas. 

Siempre había deseado tener un mejor trabajo y poder así costear un departamento donde vivir con mi novia y formar una familia, más el miedo a perder mi escaso dinero hizo que siempre que emprendiera algún proyecto, terminara dejándolo por falta de tiempo o resultados inmediatos.

Mi padre, hoy ya fallecido, en su juventud tuvo un buen pasar. Me cuentan mis tías que soy muy parecido a cómo era él, yo dudo que sea así. Ya que él terminó endeudado y nos dejó un legado de cuentas por pagar. Eso sí, vivió feliz haciendo lo que le gustaba siempre.

Siempre me pregunté si así terminaría mi vida, simplemente endeudado. Sin jamás terminar haciendo lo que me gusta.

Yo disfruto leer. Me encanta aprender de las experiencias ajenas y algo que tienen en común es que, casi siempre, el protagonista termina teniendo éxito. Pero ése es el mundo de la ficción, en la vida real, habían demasiados factores que me impedían ser feliz y mucho menos exitoso!

Hice algunos cursos de Administración y leí mucho sobre Economía. Aún recuerdo que la definición era: Es el arte de administrar múltiples necesidades con escasos recursos.

Si hay algo de cierto en mi vida es que: vivía con escasos recursos y tenía multiples necesidades! jejeje.

Pero aprendí un truco: El de la perseverancia, que no es eliminar el miedo, sino usarlo. Los neurólogos evolutivos nos dicen que nuestros instintos más primitivos nos ofrecen tres opciones cuando tenemos miedo. Podemos luchar, huir o quedarnos petrificados. Si huimos o nos paralizamos, es evidente que jamás lograremos ser feliz o hacer lo que nos gusta.

Entendí que mi problema era que encontraba excusas para no continuar en lo que sea que decidía hacer, no terminaba las cosas que empezaba y siempre me excusaba en que "no tenía tiempo" para atender mis proyectos.

¿Que podía hacer entonces?

La respuesta vino de la mano de la tecnología. En vez del dinero que todos conocemos, se habían inventado lo que hoy llaman: las criptomonedas

No les voy a explicar lo que son, de hecho, todavía sigo aprendiendo cada día sobre el tema y me doy cuenta que es probable que como redactor, jamás entienda realmente todo el panorama de cómo se generan, de donde vienen ni a donde van.

Lo que sí he aprendido es a sacar dinero en este proceso. He notado que existen varias personas alrededor del mundo, quienes todos los días hacen miles de transacciones en diferentes criptomonedas y de hecho, existe todo un mercado al cual, nosotros los latinos o de habla hispana, no hemos podido acceder por las limitaciones mismas del lenguaje español. 

Así es que conocí a Jess Alonso, un hispano parlante que decidió poner a disposición de quienes no entendemos mucho el inglés o como es mi caso, entendemos a medias y usamos google translate cuando ya no tenemos idea del contenido, un curso completamente en español que abarca muchas áreas del conocimiento del mundo del trading, la especulación y los intercambios de las criptomonedas.

¿Por qué nunca antes me animé a escribir sobre Jess Alonso?

El año pasado, cuando comencé a ver los vídeos y adentrarme en ese mundo, no sabía a ciencia cierta si realmente era posible salir de la situación apremiando en la que  me encontraba. Mi problema radicaba principalmente en que en los otros métodos de enseñanza, debía dejar de lado mis actividades que ponían pan en la mesa y me daban seguridad para llegar a fin de mes.

Hoy día, habiendo pagado la deuda familiar y en vías de comprar una pequeña casa, puedo afirmar que funciona. Siempre y cuando uno sea realmente perseverante y deje de lado las excusas, que te impiden cumplir tus sueños.

Me costó pagar los 147$ que salía el curso en el año 2016 y si bien sigue tan vigente como entonces, existe una opción de acceder al mismo por 97$. Lo que me decidió finalmente es que me ofrecía una garantía de devolverme mi dinero, sin preguntas ni reclamos, pues cuenta con un programa de protección al comprador. 

- Me pareció un trato justo.

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